A pesar de tener un lugar en varios instrumentos de derecho internacional, el término ‘alternativas a la detención’ no tiene una definición legal establecida ni constituye un concepto prescriptivo. De hecho, varios actores manejan definiciones diferentes del término. Como definición práctica, IDC entiende las alternativas a la detención como: ‘Cualquier ley, política o práctica por la que las personas no son detenidas por motivos relacionados con su condición migratoria.’

Para IDC, las alternativas son parte clave de una estrategia para reducir y eliminar el uso de la detención por motivos migratorios. Es por ello que utilizamos esta definición tan amplia: Con el objetivo de ofrecer a los gobiernos toda la gama de opciones de gestión migratoria disponibles, sin recurrir a la detención. A través de recopilar ejemplos de alternativas en la ley, las políticas públicas y la práctica, se ofrece ideas y un punto de partida para cada país a seguir reduciendo el uso de la detención migratoria y garantizar que no sea implementada de manera ilegal o innecesaria.

 

Alternativas en la ley

Por ejemplo, cuando hablamos de alternativas en la ley, tenemos los ejemplos de Costa Rica, República Dominicana y Nicaragua, entre otros. Muchas veces las alternativas en la ley limitan el uso de la detención a través de su prohibición para ciertas personas, principalmente para grupos en situación de vulnerabilidad. Desde IDC, recomendamos que las leyes incluyan un mandato para explorar primero la implementación de alternativas, antes de recurrir a la detención, así como para la revisión judicial de todas la decisiones que priven de la libertad a alguien.

Alternativas como política pública

Una distinción importante entre implementar las alternativas en la ley y como política pública es que por lo general, realizar cambios en lo segundo es a veces más accesible a los gobiernos ya que no se requiere pasar por un proceso legislativo. Por ejemplo, en México, las autoridades migratorias y de asilo coordinan con el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y organizaciones de la sociedad civil un programa de salidas de detención para personas solicitantes de la condición de refugiado. Las personas solicitantes pueden salir de la estación migratoria (centro de detención) para vivir en la comunidad en casa propia o en un albergue, y son obligadas a presentarse periódicamente ante las autoridades durante su procedimiento de asilo, mientras el ACNUR y organizaciones de la sociedad civil les brindan apoyo para satisfacer sus necesidades básicas.

Alternativas en la práctica

Las alternativas en la práctica frecuentemente dependen de la participación de organizaciones de la sociedad civil para su operación, y en algunas circunstancias, sin el apoyo del gobierno. Se encuentra un ejemplo en los EEUU donde la organización Interfaith Committee for Detained Immigrants opera una casa para hombres para que puedan dar seguimiento a su procedimiento migratorio o de asilo mientras viven en la comunidad. Esta casa funciona como una alternativa en la práctica, después de que las personas hayan sido liberadas del centro de detención, aunque no recibe ningún apoyo del gobierno estadounidense.

En países donde el uso de la detención es la excepción en lugar de la regla, las alternativas en la práctica son altamente diversas y frecuentemente son integradas con los servicios sociales y sistemas de protección nacional y apoyo público disponibles para todas las personas de la comunidad local, tanto migrantes como nacionales.

 

Las alternativas existen y son efectivas

El programa de investigación de IDC demuestra que las alternativas más eficaces en términos de los fines legítimos de los gobiernos y la garantía de los derechos humanos son las que involucran actores del gobierno y de la sociedad civil en su desarrollo, implementación y evaluación.

Mientras ninguno de estos ejemplos de alternativas son perfectos, muestran la variedad de opciones disponibles a los gobiernos para llevar a cabo la gestión migratoria sin utilizar la detención.

 

Desafortunadamente, se nota que el enfoque principal de la implementación de las alternativas a la detención sigue siendo los mecanismos de control migratorio, como son las restricciones al movimiento de las personas, el pago de fianzas, y las condiciones de reportarse ante las autoridades migratorias. Estos mecanismos buscan lograr un mayor cumplimiento con los procedimientos migratorios pero existe poca evidencia de su efectividad.

Más bien, un creciente número de estudios e investigaciones demuestran que las alternativas más eficaces son las que promuevan la participación de la persona en su procedimiento migratorio o de asilo, en particular a través de un programa de gestión de casos. Implementada desde una perspectiva de trabajo social, la gestión de casos se trata de una estrategia de intervención integral que tiene el objetivo de brindar acompañamiento especializado a las personas y apoyar la toma de decisiones participativa durante las vicisitudes que enfrentan en sus procesos jurídicos y administrativos migratorios.

Aprende más:

Preguntas frecuentes sobre las alternativas

Más ejemplos de alternativas de la región de las Américas y de todo el mundo

Los elementos de las alternativas más eficaces y el Modelo de Evaluación y Colocación Comunitaria, de nuestro manual práctico: Existen Alternativas 

Cursos gratuitos en línea sobre las alternativas a la detención